A[miga]turas !!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Hace unos años conocí a una persona increíble. Él era genial en muchísimos sentidos. Tenía ese punto canalla que tanto me gusta y, por qué no decirlo, era un cabroncete de mucho cuida´o, pero era una máquina en simplificar problemas, en hacer frases simples que resumían ideas muy complejas, y eso sólo lo hacen los grandes. Pero bueno a lo que voy, nosotros hablábamos de mil cosas, entre ellas de  los amigos. De la importancia que ambos le dábamos a la amistad y “al compromiso” que dicha palabra encierra, y fue entonces cuando se me ocurrió clasificar a los amigos, ¿no lo habéis hecho nunca? Seguro que algunos de vosotros si, me apuesto lo que queráis. Más de uno habrá sufrido vuestras más severa pero bien merecidas clasificaciones, y yo en su momento también lo hice. Me fijo en como actúan, observo sus miradas (sobre todos las que echan a hurtadillas, esas siempre son las que mas sorprenden para bien o para mal), en como hablan etc etc. Yo decidí clasificar a mis amig@s de  la misma forma que se clasifican las asignaturas de la facultad. (jajajajaja ahora mismo me encantaría observar la cara que habéis puesto al leer esto último, lástima, me la pierdo) .Bueno “grabeitatorianos” empiezo la clasificación:

Tenemos a los amigos “anuales”, a éstos los queremos muchísimos, pero queridos, no duráis en nuestras vidas más de un año. Podremos trabajar con vosotros codo con codo, mostraros afecto, incluso las pasaremos mas que bien mas de una noche, pero todo esto lo repartiremos a lo largo de 365 días, ni más, ni menos. Tenéis un principio y un fin excesivamente definido. Después vienen los “cuatrimestrales”, éstos son esas personas que se quedan en el segundo nivel. No pasan de “compañeros”. Al principio te vendaran sonrisas baratas, no os engañéis, intentan siempre caerte bien y eso, como leí una vez por ahí, “quien intenta caerte bien es porque quiere sacarte algo” así que mantened esto en mente porque ya os digo yo que os aliviara más de una herida. No pasan de cuatro meses. Luego están los de “libre”, éstos son los que siempre están ahí, aunque no siempre los tomamos, son esos amigos que sientes como amigos pero que los dejas pasar. A  los que se te olvida cuidar porque crees que “siempre” estarán esperando para ti, y eso “grabeitatorianos” como ya anuncia Bunbury: “para siempre me parece mucho tiempo”. No os confiéis, cuidar a esos amiguetes medio olvidados porque si no antes de que os deis cuentas estarán como la serie de la cuatro, un poco “perdidos”. Finalmente llegamos a mis favoritos. Éstos son los “obligatorios”, este es el amigo que te hace falta. El que no te falla. El que está donde tiene que estar y cuando tiene que estar. El que está siempre contigo, ya sea cerca o lejos, pero te deja ser libre. El que te entiende. El que te llama la atención cuando has metido más que la pata. El que no te baila el agua. El que te quiere aun conociéndote. El que te abraza cuando hay que abrazar y no todos los días. Este es el único que merece ser llamado por su nombre AMIGO. A los demás sólo os digo que, “fue bonito mientras duró”.

Gracia Rodríguez-

p.d: tú eres “obligatoria” porque te quiero (boinggg, boingggg, boinggg =))))